lunes, 19 de noviembre de 2012

Lectura Origen de la Filosofia


ABANDONO DEL MITO Y SURGIMIENTO DEL SABER RACIONAL.

La filosofía surge en Jonia, una colonia de Asia menor. En la ciudad de Mileto nacieron quienes, en lugar de las invenciones de los mitos de Homero y Hesiodo, buscan explicaciones basadas en la razón.

En general. Por mito cabe entender el conjunto de narraciones fantásticas de los poetas que pretenden darnos una explicación total; una explicación en la que se da respuesta a todos los problemas a cerca del origen  y naturaleza del universo, el hombre, el orden social, y otras interrogantes.

         En este tipo de explicaciones, tenemos que:

a).- Las fuerzas naturales como el fuego, el agua, el viento, etc., son personificadas y divinizadas, son dioses cuya influencia se siente en todos los acontecimientos de la vida.

b).- Los hechos y fenómenos del universo dependen de la voluntad de los dioses.

Con base en lo anterior, es posible darse cuenta de que tanto los fenómenos de la naturaleza como las acciones de los hombres- individual o colectivamente- dependían de la voluntad arbitraria de los dioses, eran por lo tanto algo totalmente imprevisibles.

Los primeros filósofos de quienes tenemos noticias son los milesios, estos son quienes ya no satisfacen las explicaciones míticas, pues lo que ellos quieren conocer es la verdad, y no sólo lo que parece serlo, y para ello necesitan apoyarse en logos: la razón. Así, el pensamiento filosófico irá invadiendo, poco a poco, los terrenos del pensamiento mítico, creando nuevos modos de explicación.

 Las razones de este cambio en la manera de tratar de explicar la realidad son diversas, pero sobresalen dos, a las que llamaremos estímulos históricos y psicológicos.

ESTÍMULOS HISTÓRICOS.

Expansión del dominio griego.- un acontecimiento histórico de incalculable importancia para el desarrollo del espíritu griego es la fundación de innumerables colonias griegas en todo el mundo habitado.

De todas estas colonias, la más privilegiada es Mileto, la más poderosa de las ciudades de Asia menor; la metrópoli del comercio y la navegación en la que se podía  encontrar todo el saber práctico de los hombres que llegaban de Babilonia, Iberia, del país  de los Escitas, Egipto, y otras partes.

Desarraigo de las tradiciones.- durante los siglos VII y VI A.C. se presenta una liberación absoluta de los compactos lazos étnicos; liberación que trae como consecuencia un desarraigo de las tradiciones locales, propiciando un suelo fértil para el surgimiento de nuevas formas de pensamiento, de manera específica nos referimos aquí al pensamiento filosófico.

Carácter de la religión griega.- la carencia de dogmas y de una casta sacerdotal encargada de mantener la ortodoxia a diferencia de otras culturas, lo que permitió que cualquier novedad en el campo del pensamiento no chocara con alguna ideología religiosa que se opusiera a su desarrollo.

La paz social.- Otra circunstancia histórica importante que hay que agregar es la paz social que la ciudad gozaba.

ESTÍMULOS PSICOLÓGICOS.

Es justo señalar que tal vez las circunstancias históricas aquí mencionadas, por sí solas no habrían bastado para propiciar el nacimiento del pensamiento filosófico si no hubiera sido, además, por la peculiar predisposición intelectual del hombre griego, su sentido de realidad y su poder de abstracción; la tendencia continua hacia una consideración universal y una marcada inclinación racionalista, ávida de ir al fondo de las cosas objetiva y escuetamente.


PROBLEMAS FUNDAMENTALES A RESOLVER PARA LA FILOSOFÍA.

Se dividen en: problemas diferentes al conocimiento, el problema del ser, problema de lo absoluto, la existencia auténtica del hombre, el problema de la constitución y evolución del universo.

1.- Los problemas referentes al conocimiento.- se trata de determinar la validez del conocimiento; ¿en qué condiciones es verdadero?,  hasta donde alcanzan y se limitan nuestras facultades cognoscitivas?

El hecho que cada uno tenga su propia respuesta, denotaciones completamente opuestas a otra, no deja de ser inquietante para el que pretende profundizar en la realidad.
¿Porqué no hay una respuesta única a los problemas de el alma, la libertad, Dios, el bien y el mal.

 Ha habido cinco principales soluciones al problema del conocimiento a saber:

A).- ECEPTICISMO: Niega validez a todo conocimiento, lo mejor es dudar.

B) EMPIRISMO.- solo concede capacidad cognoscitiva a las facultades sensibles, o mejor dicho un conocimiento es válido solamente cuando esta apoyado en una experiencia sensible.

C) RACIONALISMO.- por el contrario pretende que los sentidos engañan a la necesidad, y a la universalidad del conocimiento científico, este sólo se consigue por medio de las facultades intelectuales.

D) IDEALISMO.- por su parte, niega que podemos llegar a conocer las cosas independientemente del sujeto cognoscente, solo captamos nuestras propias ideas.

2.-problema del ser.- este problema central de la metafísica  trata de preguntar a cerca del ser, en que consiste el ser como verbo.

3.- Problema de lo absoluto.- se trata del problema de la existencia de DIOS, todos los filósofos entratando del tema e incluso los ATEOS han tenido que fundamentar o explicar el motivo de su negativa.

4.- Problema de la existencia auténtica del hombre: en la actualidad ha tomado auge el existencialismo, cuyo tema central es la elucidación de las características de la existencia auténtica del hombre.

5.- Problema de la constitución  y evolución del universo: el problema del tiempo y espacio, de la evolución y de la esencia  de la materia, esto constituye uno de los temas centrales de las obras e investigaciones de los físicos modernos; generalmente son los científicos los que se han dedicado a penetrar filosóficamente en dichos asuntos.



lunes, 5 de noviembre de 2012

La filosofía de Comte se encuentra con la revuelta moderna contra los antiguos que inició Francis Bacon y consistió, a grandes rasgos, en la asunción de la razón y la ciencia como únicas guías de la humanidad capaces de instaurar el orden social sin apelar a lo que él considera oscurantismos teológicos o metafísicos.